Nacido el 13 de enero de 1962 en Springhill, Louisiana, los dos metros de altura de Trace Adkins le convierten en un hombre imponente. Pero es su igualmente imponente voz de barítono lo que llama realmente la atención en cuanto se pone a cantar.

Trace Adkins se crió en una familia con tradición musical, su madre y sus tías cantaban en el coro de la iglesia, e incluso uno de sus tíos llego a grabar álbumes de Gospel. Cuando Adkins todavía estaba en el instituto se unió al cuarteto de Gospel the New Commitment, con los que llegó a editar dos discos de forma independiente. Ya en la universidad jugó como defensa al fútbol americano en Lousiana Tech, pero una lesión le obligó a abandonar ese camino, aunque finalmente conseguiría la licenciatura en tecnologías del petróleo. De todas formas nunca perdió su pasión por la música ¿Pruebas? Ya trabajando en los pozos de petróleo sufrió un accidente laboral que tendría como consecuencia la pérdida de movilidad para toda su vida de su dedo meñique de la mano izquierda… pidiendo al médico que debía reconstruirlo que lo dejara en la exacta posición que le permitiera acomodarlo al mástil de una guitarra.

La popularidad que ganaría en el circuito de Honky Tonks de su zona en sus actuaciones nocturnas acabó por convencerle que su sitio estaba en Nashville al que se trasladó definitivamente en 1992 para concentrarse en su carrera musical. Finalmente tras una reunión con el entonces presidente de Capitol, Scott Hendricks, se convertiría en su primer fichaje para la compañía. El propio Hendricks coproduciría en 1996 su primer disco Dreamin’ Out Loud, que se convertiría en platino, le reportaría ese mismo año el premio de la ACM al mejor nuevo intérprete masculino y del que surgiría su primer número uno “(This Ain’t) No Thinkin’ Thing”. Ese mismo año, tras pedir en matrimonio a su novia desde el escenario en una actuación en el Opry, se convirtió en la sensación para los medios de Nashville.

Sus primeros trabajos, básicamente Honky Tonk de corte neotradicionalista, fueron evolucionando con los años incorporando las influencias pop-rock que dominan en el Country más comercial, asegurándole tiempo de radio y convirtiéndole en una de las grandes figuras del Country de la primera década del siglo XXI cuando, más con sus álbumes que sus singles, se convirtió en habitual ocupante del número uno.

Discografía de Trace Adkins

1996  Dreamin' Out Loud  ( Capitol )
1997  Big Time  ( Capitol )
1999  More...  ( Capitol )
2001  Chrome ( Capitol )
2003  Comin' on Strong  ( Capitol )
2005  Songs About Me  ( Capitol )  
2006  Dangerous Man  ( Capitol )
2008  X  ( Capitol )
2010  Cowboy's Back in Town  ( Show Dog Nashville )

Página Web oficial de Trace Adkins

http://www.traceadkins.com

Videos de Trace Adkins

Para muchos de sus fans Good Time es el álbum de retorno de Alan Jackson, que había abandonado el sonido de raíz tradicional que le ha caracterizado a lo largo de su carrera para embarcarse en la grabación de un disco de música religiosa, Precious Memories, en 2005 y en el personal e intimista Like Red on a Rose en 2006. Quizá ese margen de tiempo es el que le permitió personalizar Good Time hasta el punto de que los nada menos que diecisiete cortes que contiene lleven su firma (algo hasta ahora inédito para él)... O quizá sea la forma de compensar a sus incondicionales por la espera sufrida hasta reencontrarse con su querido y admirado Alan de toda la vida.

Desde luego las expectativas comerciales se cumplieron sobradamente pues los singles “Small Town Southern Man”, “Country Boy” y “Good Time” consiguieron liderar las listas de Country. Con estos dos últimos, además, alcanzando el Top50 de las generales. Son éstas canciones que nos presentan al Alan divertido y relajado, y sin embargo absolutamente convincente, que disfruta de los pequeños placeres de la vida y nos invita a compartir el espíritu y la atmósfera del Sur de EEUU. Una sensación que tiene continuación con la playera “Laid Back 'n Low Key” y llega a su punto culminante con la excepcional “I Still Like Bologna”, una canción diez en la que Alan se luce, como intérprete y como compositor. Incluso se remonta al pasado para explicarnos cómo conoció a su mujer en “1976”. No falta ni el humor ni la religión, esenciales para el buen sureño, que llegan juntos con “If Jesus Walked the World Today” donde nos enteramos de que si Jesús caminara entre nosotros... sería un hillbilly.

También nos guiña un ojo con picardía en “Nothing Left to Do”, cuando le canta a su esposa que “no tenemos nada que hacer / ahora que ya lo hemos hecho”, ¿se puede expresar en menos palabras la rutina en la que se puede convertir un largo matrimonio? Pero hay tiempo para ponerse romántico, invitando a Martina McBride a cantar a la alegría del amor en el animado y magnífico dúo “Never Loved Before” o con la acústica “Listen to Your Senses”, e incluso triste con la dolorosa “Sissy's Song”, que también sería editada como single, alcanzando el noveno puesto en listas.

Incorpora dejes de Bluegrass con “Long Long Way”, que deja tiempo para el lucimiento de los músicos. Para aquellos que sienten el Honky Tonk de toda la vida con el acento de George Jones quedan “When the Love Factor's High” y, especialmente, “If You Want to Make me Happy”, porque: “si quieres hacerme feliz, ponme un bourbon con hielo y pincha todas las canciones tristes de la jukebox”. Justo en el clavo Alan, justo en el clavo.

Good Time es un magnífico álbum de Country, tan indudablemente contemporáneo como fiel a las raíces que han definido el estilo a lo largo de su historia. Es tan fácil y agradable de escuchar que es posible que las auténticas joyas que lo componen pasen desapercibidas individualmente, con su brillo apagado por el esplendoroso conjunto.

Sr. Jackson: le agradezco y me descubro ante usted por otro trabajo excepcional. Y ya van...