Asleep at the Wheel - Remembers the Alamo (2003)

Asleep at the Wheel - Remembers the Alamo (2003) - 4.2 out of 5 based on 13 votes

Ratio: 4 / 5

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Como orgullosos texanos (de nacimiento o de adopción) los miembros de Asleep at the Wheel bajo la dirección de Ray Benson (voz solista, líder de la banda y productor del disco que nos ocupa) se embarcaron en 2003 en el proyecto de sacar adelante un álbum conceptual dedicado a rememorar el histórico y legendario sitio de El Álamo, la misión en la que se refugiaron un grupo de rebeldes texanos para enfrentarse a un ejército mexicano muy superior en número comandado por el general Santa Ana. Un concepto que se extiende hasta canciones que hablan de la ciudad en la que se encuentra la vieja misión, San Antonio.

No pocas veces tan icónica batalla para los estadounidenses ha sido llevada a la pantalla. Así encontramos las canciones que compuso Dimitri Tiomkin para la película que protagonizara John Wayne en 1960, “Green Leaves of Summer” y “Ballad of the Alamo” a las que la intervención del Tosca String Quartet dota de la grandilocuencia del lenguaje cinematográfico, en ésta última es evidente el respeto por el que fuera su primer intérprete, Marty Robbins. También se añade “Ballad of Davy Crockett”, el simpático y entrañable tema principal de la serie de TV dedicada al legendario personaje que encontraría la muerte entre los muros de la misión junto al no menos legendario oficial al mando de la defensa, el Coronel Travis, cuya desesperada pero orgullosa carta solicitando refuerzos es recitada enlazada con el tema principal del disco “Remember the Alamo”, algo que ya había hecho Willie Nelson años antes y que sirve de inspiración a Benson.

Es encomiable el esfuerzo por hacernos vivir aquel evento, aunque deja en el aire explícitamente en las notas del disco si la historia tal y como la conocemos (con todas las tergiversaciones de las versiones cinematográficas) es la verdad para ambos bandos. Sin embargo sí responde a la pregunta ¿qué música sonaría en el Alamo en aquel año de 1836? Seguramente tonadas tocadas con el violín, y más considerando que el propio Davy Crockett era un violinista originario del entonces fronterizo Tennessee, donde la música de violín era la más popular. Así incluyen tres temas instrumentales tradicionales como “Billy in the Low Ground”, “Eighth of January” y “Soldier’s Joy” para mayor lucimiento del extraordinario fiddler de la banda Jason Roberts. También encontramos el eco del bando mexicano con la trompeta de “Degüello” el tema que la historia dice que Santa Ana hacía tocar como preludio a una carga sin cuartel.

No podían faltar temas como “Yellow Rose of Texas”, un auténtico himno para los texanos, ni “New San Antonio Rose” de Bob Wills, donde Asleep at the Wheel puede destaparse como la mejor banda de Western Swing en activo, un estilo que contrariamente a lo que suele ser habitual en sus discos no es el predominante en este trabajo, en esta línea era obligado incluir otro estándar como “Across the Alley from the Alamo”, aunque en este caso la misión sólo sirva para situar geográficamente la curiosa historia de un indio navajo y un caballo pinto, una canción original de los Mills Brothers aunque también indefectiblemente unida al repertorio de Bob Wills.

Convierten el animado tema de Monte Warden “Stout and High” en una melancólica y atmosférica balada. Mientras que la única canción original, “Don’t Go There”, sirve de excusa para incluir unas gotas de humor al recordar la anécdota sucedida en 1982 cuando Ozzy Osbourne fue detenido y sentenciado a no entrar en San Antonio en diez años por aliviar sus necesidades fisiológicas contra el muro del histórico monumento, con una cogorza de campeonato encima tras un concierto.

Remembers the Alamo es un disco diferente en la amplia discografía de Asleep at the Wheel y un paseo por la historia de Texas al ritmo de una banda sonora extraordinaria.

 

Wayne Hancock - Wild, Free & Reckless (1999)

Wayne Hancock - Wild, Free & Reckless (1999) - 4.4 out of 5 based on 8 votes

Ratio: 4 / 5

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El tercer disco de Wayne Hancock, Wild, Free & Reckless, fue grabado a la antigua usanza. Como es habitual para Hancock en directo, en los Estudios Fire Station de San Marcos, Texas, en el asombroso tiempo de sólo dieciséis horas y también producido por Lloyd Maines como sus anteriores dos entregas, Thunderstorms and Neon Signs y That’s What Daddy Wants. Mezclando brillantemente su característico y acelerado ritmo de directo con Country de la vieja escuela y Swing de la época de las Big Bands consigue como resultado un sonido genuina e inconfundiblemente norteamericano.

 

No es difícil imaginarse con su escucha devorando millas por la mítica Ruta 66, donde Hancock conjura  a los fantasmas de Jimmie Rodgers y Hank Williams y los hace bailar al ritmo de Bob Wills, consiguiendo que la mezcla no se quede en un acto de preservación de un tiempo pasado, sino conviertiéndola en una orgullosa renovación del mismo que insufla aire fresco a aquellos sonidos. Y es que eso es lo que a Hancock le sale de forma natural, avanzando en el tiempo hasta desatados Rockabillies como “Flat Land Boogie”. También están invitados Ernest Tubb, del que versiona “Kansas City Blues” y Carl Perkins con una muy especial versión de “Blue Suede Shoes” que a mí me ha dejado con la boca abierta, consiguiendo hacer suyo un clásico como éste mediante sutiles pero apreciables variaciones respecto al original. Mucho talento.

 

Haciendo honor al título del disco, Wayne Hancock se muestra Salvaje, Libre y Temerario y su música, junto con su forma de vivirla y hacerla, está para demostrarlo.

 

Dick Curless - Tombstone Every Mile (1965)

Dick Curless - Tombstone Every Mile (1965) - 4.8 out of 5 based on 8 votes

Ratio: 5 / 5

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Nativo del estado de Maine, Dick Curless llevaba tiempo grabando para discográficas locales cuando en 1964 Dan Fulkerson le ofreció una canción que había escrito, “A Tombstone Every Mile”, en la que hablaba de una peligrosa sección de carretera en Maine que causaba frecuentes muertes entre los camioneros. Tras editarla como single en Nueva Inglaterra su éxito en la región llamó la atención de Capitol, que fichó a Curless para su filial Tower. Lanzada nacionalmente en EEUU en 1965, llegó al top5 y provocó la edición de un álbum con el mismo título que entró en el top20.

Aunque aprovechara el éxito del single del que toma el título, el disco no puede ser considerado estrictamente un álbum de música Trucker, pese a que según avanzara su carrera Curless sería cada vez más asociado al estilo. Como producto de su época, no faltan los típicos añadidos del Sonido Nashville, coros y secciones de cuerdas. Especialmente evidentes en baladas como la segunda canción firmada por Fulkerson que incluye el disco, “Six Days a Day (the Trains Came Down)”, que llegaría a colocarse en el puesto doce en listas. En la profunda y sin embargo versátil voz de Curless, tan capaz de elevarnos con ella hasta casi tocar las nubes como de hundirnos en el más insondable de los abismos, también encontramos versiones de canciones ya populares como “Uncle Tom Got Caught” (Wynn Stewart) y “King of the Road” (Roger Miller) que, curiosamente, también habla de Maine, el destino del vagabundo protagonista de la canción.

Pero quizá la más original de las versiones es la canción japonesa “China Nights (Shina No Yoru)”, donde se atreve incluso a entonar unas líneas en japonés, que había aprendido en el ejército a principio de los cincuenta, y que se había convertido en una de las favoritas del programa de radio que presentaba mientras servía en Corea, una canción delicada y magnífica. “Sunny Side of the Mountain” servía de presentación a aquél programa y aquí Curless nos sirve su propia interpretación. También deja entrever su querencia por el Western con la tradicional “Streets of Laredo” y “Teardrops in My Heart”, que había sido un éxito para los Sons of the Pioneers en 1947.

The Baron, como Dick Curless sería apodado, nos sirve en Tombstone Every Mile una completa ración de buen Country de los sesenta, con la guinda de una canción que ha quedado como uno de los auténticos clásicos indelebles de la música Trucker. Agradecidos, nobleza obliga.

 Nota: En 2004 Sundazed, la firma especializada en reediciones de EMI, reeditó el álbum original de Capitol en CD.

 

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