Los sucesivos cambios en su formación que BR549 ha sufrido en los años transcurridos desde que tomaron al asalto la vida nocturna de Nashville, con unas actuaciones tocando por propinas y que muchos todavía recuerdan como las más excitantes de la historia de la calle Broadway, lo normal es que hubieran acabado con la banda hace tiempo. Sin embargo, diez años después de su debut discográfico, siguen encontrando fuerzas para ofrecernos nueva música.

Para la grabación de este disco se vieron obligados a cambiar su forma de trabajo. En sus discos anteriores solían entrar en el estudio tras una de sus maratonianas giras, con las canciones trabajadas en la carretera y sobre los escenarios. Pero con los miembros fundadores dispersos: Donnie Herron (mandolina, steel, fiddle, banjo) de gira con Bob Dylan, Shaw Wilson (batería) viviendo en Arizona y Chuck Mead (voz y guitarra) inmerso en otros proyectos, necesitaron varios meses para poder reunirse con el bajo Mark Miller y finalizar las sesiones de las que saldría este Dog Days.

No sólo es la rutina de grabación  lo que ha cambiado. La impresión general del disco, aunque sin abandonar nunca el regusto retro, también, marcando algunas diferencias con la que dejaban sus anteriores trabajos. Incorporando sonidos más modernos, ciertos experimentos instrumentales y un sonido más rockero que pone algo de distancia respecto a su estilo habitual, directo deudor de las grandes referencias de los años cuarenta, cincuenta y sesenta.

Se abre el fuego a ritmo de Bluegrass con la animada aunque inquietante “Poison”, en la que el banjo es el protagonista. La balada “After the Hurricane” es la primera de las canciones que ponen de manifiesto esas diferencias respecto a su pasado inmediato, quizá recordando más a un joven Neil Young que a sus habituales referencias. Encontrar un nombre como Guy Clark en la autoría de una canción suele ser una garantía, así sucede con “Lower Broad St Blues”, que deja un inevitable poso de melancolía tras su escucha. Una sensación que también consigue “I’m Goin’ Down”. Otros invitados ilustres, the Jordanaires, se dejan escuchar en los coros de “The Devil in Me”, aportando un aire Gospel a la canción. El bajo Mark Miller toma la voz cantante en “You Are the Queen”, una loa de un marido a su mujer con mucho swing, que tanto en la letra, como en la forma de interpretarla rememora otras épocas. La única versión del disco no se trata de una canción con sus buenos 40 años encima (como solía ser habitual), pues nos encontramos con el tema de Dave Edmunds “A-1 on the Jukebox”, que “sólo” es de 1978.

Otros cortes no se alejan tanto de lo que nos tienen acostumbrados a escuchar en anteriores trabajos, como “Leave it Alone”, o “Bottom of Priority” que trata el caso del encarcelado activista de los nativos americanos Leonard Peltier, aunque como dice el propio Chuck Mead “es una canción protesta que se puede bailar”. “Cajun Persuasion” tiene una introducción casi de marcha militar para, tras superarla, adentrarse en los pantanos del Mississippi flotando sobre las notas del fiddle. El disco se cierra con otro divertido Swing “Let Jesus Make You Breakfast”.

Quizá Dog Days, siendo un buen disco, no sea el mejor de BR549. Aunque de manufactura impecable (creo que sería difícil encontrar una banda en activo en la escena Country actual con tantas tablas) parece haberse perdido algo de la frescura de sus anteriores trabajos. Pero quizá sí sea el de más fácil digestión para aquellos a los que cuesta enfrentarse a sonidos “de otras épocas”.

Uno de los discos más sorprendentes con los que me he tropezado recientemente, es este de Jordan Carter, un tornado nacido en el MedioOeste americano, un artista desconocido para mi hasta el momento, que pese a su juventud y su menuda apariencia es el poseedor de una voz profunda y con una gran personalidad, muy al estilo de Josh Turner.

Los caminos por los que transita Jordan, son los del country más tradicional, y la verdad es que lo hace estupendamente bien, haciendo suyos temas tan clásicos como el de sobra conocido “Ring of Fire”, de Johnny Cash, y saliendo indemne y con éxito de esta aventura como es versionear a uno de los grandes y no morir en el intento.

Como él mismo reconoce sus influencias más tempranas fueron Johnny Cash, George Jones, Merle Haggard, Hank Sr, Hank Jr, Hank III, Randy Travis, David Allan Coe, Kris Kristofferson, Dale Watson, Shooter Jennings, Elvis Presley, Bob Dylan, Chris Ledoux, Hank Thompson, Ernest Tubb, Waylon Jennings.

Si hubiera que hacer una comparación de estilos, y para hacerse una idea, podría decirse que Jordan suena como Johnny Cash, Josh Turner, Randy Travis, Ernest Tubb, Chris Ledoux. También ha compartido escenario con artistas de la talla de Marty Stuart, Jamie O'Neal, Confederate RailRoad, Angela Hacker (Nashville Star winner), Ericka Jo (Nashville Star), Cody McCarver, Richey McDonald (Lonestar), Rosanne Cash, Carl Mann, W.S. Holland, Rayburn Anthony, Jim Tittle, Joann Cash, Tommy Overstreet, Billie Joe Shaver, Mike Manual, Smokey Lonesome, entre otros.

Con un estupendo curriculum musical a sus espaldas que incluye premios como los 11 top Awards de la NACMAI (North America Country Music Assoc. International) 3/11/07-08

2007-08 Top Male Entertainer of the year

2007-08 Top Male Entertainer (traditional country)

2008 Top MALE VOCALIST

2008 VIDEO OF THE YEAR(CHANCES)

2008 SONG OF THE YEAR/ LET IT RAIN

2008 TRADITIONAL SONG OF YEAR/ DOES IT HURT

2007 Most Promising Vocalist of the Year

2007 Most Promising Award winning Album

2007 Singer/ Songwriter of the year/ traditional country
"As the pendulum swings"

2007 Singer/Songwriter of the year/ country gospel
"Chances"

2007 Top Traditional Duet of the year

En su álbum Chances (2006), nos encontramos con varias covers y algunos temas originales compuestos e interpretados por Jordan. Abre el disco una estupenda versión del “Ring of Fire” de Johnny Cash, que por momentos y con su versátil tono de voz nos parece estar escuchando a Johnny, le sigue una melancólica balada que da título al disco, “Chances”, escrita por Jordan, donde los sentidos se dejan mecer por la sugerente voz del interprete; otro clásico es la versión del tema de Hugh Thomasson, lider de Outlaws, el archifamoso y versioneado hasta la saciedad “Ghost Riders in the Sky”, que no obstante y después de haberlo escuchado cientos de veces a los Outlaws, en la voz de Jordan sigue teniendo toda la magia de la primera vez, sobresaliente interpretación, vientos cargados del polvo que levantan las grandes manadas recorriendo la pradera, esencia de Cowboy y olor a cuero viejo; “Red Top Mountain”, maravillosa canción con una ligera brisa de gospel, “Understand your Man”, tema alegre con un cierto aire trotón, “Right Place, Right Time”, balada preciosista, maravillosos coros de fondo, nostalgia exudando por todos los poros de la piel, magistral voz de Jordan que sobresale por encima de todo el entorno, “The Wild Side of Life”, auténtico Honky Tonk con un cierto regusto clásico, interpretado sin prisas para poder ser saboreado hasta su más íntima esencia, “Does It Hurt”, maravilloso medio-tiempo donde la voz de Jordan lleva las riendas y marca el paso de este magnífico ejemplar, “More Than My Old Guitar”, suave Honky Tonk que nos hace retroceder a tiempos mejores, “As The Pendulum Swings”, otro tema escrito e interpretado por Jordan Carter, su voz fluye suave como una columna de humo que se aleja en el horizonte, muy despacio ¿Por qué apresurarse?, saboreando el momento… mientras el péndulo se balancea.

Disco elegante donde los haya, todos los temas son buenos, e interpretados con una voz muy poco común en la escena actual, puede achacarse la escasez de temas propios, aunque la interpretación de covers en este disco se supera con nota. Muy buen trabajo.

Una curiosidad que me ha llamado la atención, las iniciales de Johnny Cash y Jordan Carter… son las mismas: J.C.

¿Será este tío el maestro reencarnado?.........uhhmm