Pure Country es la Banda Sonora de la película del mismo título que George Strait protagonizó en 1992... Y se convertiría en su mayor éxito de ventas hasta la fecha, consiguiendo el quíntuple platino, merced a las más de cinco millones de copias vendidas, e incluyendo dos singles que escalaron hasta el número uno: la animada “Heartland” y la delicada balada romántica “I Cross My Heart”.

Strait se mete en el papel protagonista, una megaestrella del Country agobiada por el éxito, del que decide huir y que acaba por reencontrarse a sí mismo en un pequeño pueblo de Texas en mitad de ninguna parte.

El disco resulta bastante más animado que el estándar de Strait. Resulta incluso claramente sobreproducido en temas como el mencionado “Heartland” o “Where the Sidewalk Ends”. Precisamente las canciones que el protagonista canta en la cima de su fama, con todo el peso de la Industria sobre sus espaldas y su música. Para hacer este hecho todavía más evidente, encontramos la versión de “Heartland” que aparecía en los títulos de crédito de la película. Sencilla, casi espartana, y cantada junto a su propio hijo, por entonces un niño de pocos años.

Manteniendo la línea habitual de Strait quedan cortes como “Baby Your Baby” o “When Did You Stop Loving Me”. De todas formas el éxito de este disco marcaría un antes y un después en la relación de Strait con el mainstream. Para empezar es el primero en el que interpreta dos canciones del gran Jim Lauderdale, que se convertiría en uno de sus autores de cabecera, “Where the Sidewalk Ends” y “The King of Broken Hearts”, que recibiría posteriores versiones de Mark Chesnutt en 1995 y Lee Ann Womack en 2008. También el primero producido por Tony Brown, una asociación que ha mostrado indisoluble junto a un grupo de músicos que se han convertido en habituales en todos los discos de Strait a partir de éste.

Si hay algo que consigue Pure Country, el álbum y, por extensión, la película (o viceversa), es marcar las diferencias entre la artificiosidad de los grandes escenarios y las producciones de Nashville frente a la pureza musical que puede encontrarse en una voz sincera acompañada de una simple guitarra. A destacar que Strait brilla en ambos entornos sin perder ni renunciar a lo mejor de cada uno de ellos.

 A contar entre los discos de Country fundamentales e imprescindibles de la década de los 90.

Muchos artistas están haciendo un disco de versiones de clásicos últimamente. Eso es lo que debió pensar Lorrie cuando la llamó el productor Wally Wilson para explicarle el proyecto.

Pero hay una cosa que lo diferencia de los demás, está grabado al viejo estilo, sin overdubs, todos los músicos en el estudio y grabado directamente, de la misma forma que lo hacía su padre, el miembro del Hall of Fame, George Morgan, y ella le acompañaba al estudio.

El resultado es impresionante, uno de los mejores discos del año sin ninguna duda, por supuesto ayuda la pura voz country de Lorrie, una de las mejores desde Tammy Wynette, nunca ha sonado mejor, este es el álbum para el cual ella ha nacido.

La producción es inmejorable, y el método de grabación hace que sientas a los músicos a tu lado. Ella misma redujo la lista de posibles canciones de 200 a 50, después dejó que Wally hiciese la selección.

Unas son más conocidas que otras, incluso hay dos canciones que han salido hace poco en recientes discos de versiones como "Wine me up" y "After the fire is gone", pero con las técnicas de grabación y la voz de Lorrie, estas rozan la perfección.

Tracy Lawrence interviene a dúo con Lorrie en la canción de Conway y Loretta "After the fire is gone", dos estupendas voces para una estupenda canción. También se atreve con la canción de Elvis "Are you lonesome tonight", la cual interpreta con aplomo. Hay dos canciones de un cantante que a mí personalmente me gusta mucho, Mel Street, como son "Borrowed angel" y "Lovin' on backstreets". También aparece Raul Malo en la clásica canción de Freddy Hart "Easy lovin'" pero el dueto a mí se me parece más a la versión que interpretaron en su día Conway y Loretta.

Con su turbulenta vida privada, la canción de Tammy "'Til I get it right", admite que debería haberla escrito ella misma, al igual que la canción de Merle Haggard "I'm always on a mountain when I fall" que fue nº 2 para Haggard en 1978.

Echa mano del repertorio de su padre con la canción escrita por Mel Tillis "All right (I'll sign the papers)", a pesar de que Ray Price la hizo más famosa.

También se enfrenta a una canción difícil de versionar como es "By the time i get to Phoenix" de Jimmy Webb, pero de nuevo sale airosa. Otra canción es "Misty blue" cantada en su día por Wilma Burgess aunque en los años 70 fue un super éxito soul para una cantante llamada Dorothy Moore.

Hay varios álbumes circulando por ahí de artistas haciendo versiones pero ninguno se aproxima al nivel de este. Vamos a esperar que tenga el suficiente éxito para que Lorrie nos vuelva a deleitar con otras cuantas buenas canciones.