Alan Jackson - Like Red on a Rose (2006)
Alan Jackson (junto a George Strait) se ha convertido en la figura incontestable entre los artistas contemporáneos de más éxito que mantiene encendida la antorcha de la tradición de la 'Country Music'. Si algo ha caracterizado a sus discos, uno tras otro, es que los aficionados saben qué van a encontrar cuando los colocan en el reproductor.
Sin embargo en la presentación de Like Red on a Rose él mismo declaró en 2006 que el disco nació del deseo de hacer algo que fuera “un poco más sobre donde estoy en mi vida ahora mismo”. Durante una conversación que tuvieron en 2005 Alison Krauss y Alan Jackson éste le dijo que hacía años que quería hacer un disco de Bluegrass. “Así es que finalmente le pedí a Alison si querría hacer un disco de Bluegrass conmigo, y dijo que sí. Empezamos a trabajar en ello, e hicimos este disco en el que no hay ni una pizca de Bluegrass”, bromeaba.
Alison Krauss, ganadora de nada menos que veinte Grammys, aportó canciones, en su labor de productora, de autores entre los que se cuentan Leon Russell, la estrella del Bluegrass Sidney Cox y el más 'folkie' Patrick Brayer, y de grandes autores de Nashville como Robert Lee Castleman, que firma, entre otros, el tema de fascinante atmósfera que da título al disco y que fuera primer single del mismo. La mano de Krauss guía a Jackson por un camino de exploración de muy diversas emociones, desde el anhelo de la primera canción “Anywhere on Earth You Are”, hasta el dulce tributo al amor de una esposa en “Had It Not Been You”. El aire gospel de “Don’t Change on Me”, una loa a la persona amada apoyada en las voces de Lee Ann Womack, Dan Tyminski y la propia Krauss, lo aleja un poco del tono general del disco.
El propio Alan Jackson decía “Me ha gustado que Alison mandara en todo, era su bebé. Hay incluso una de mis viejas canciones, que escribí hace años (‘A Woman’s Love’, el único tema que firma Jackson en todo el disco). No suena para nada como la original, pero ha hecho una fantástica grabación de ella”.
Como su disco anterior, Precious Memories, quizá de difícil digestión para los que gustan del Jackson al que están más acostumbrados. Like Red on a Rose es un disco maduro, intimista, introspectivo y muy personal. El de un hombre enfrentado a sus recuerdos y a sus sentimientos, que nos deja un poso de melancolía. Un trabajo que se convierte en una revisión Country de los grandísimos discos que con esas mismas características nos dejó, hace ya muchos años, Frank Sinatra. Con la diferencia que donde Sinatra aparecía amargado y hundido en sus miserias, Jackson se nos muestra romántico y feliz del momento que le ha tocado vivir.
De escucha recomendada, relajado, en la quietud de la noche. En pareja, o para encontrarse con uno mismo.