Me & Bobbie McGee, una canción con alma viajera
Hoy me viene al recuerdo el Clásico de Kris Kristofferson "Me & Bobbie McGee" recuperando la escena de cuando, hace ya unos años, le entregué en mano mi libro Country Music Stars recibiéndolo con sumo agrado. ¡Ah, ver a este icono del género en persona, menudo lujo! y aquí, en nuestra Costa Brava. Dispongo de más de 100 versiones de "Me & Bobbie McGee", algunas interpretadas por artistas ajenos al Country. Siempre me gustó esta balada, transmite ese espíritu viajero del estereotipo ‘Ramblin'Man’, ‘Wanderin’, ‘Drifter’, ‘Hobo’, etc., tan habitual en la iconografía del género. Ese vagar sin rumbo fijo, buscando trabajo en muchos casos, huyendo de la miseria de un vida rural en gran parte aislada de la sociedad. No es baladí pues que en los Apalaches, cuna del Country, se reservasen intactas muchas baladas folklóricas anglo-celtas del Viejo continente aún sin ser recicladas por aquel country arcaico. Pero, una vez muchas se transformaron en Country, fueron esos espíritus con ansias de viajar, ganarse el pan con la música o persiguiendo el propósito de establecerse en tierras más fértiles quienes más hicieron por extenderlas, sacarlas de su entorno.
<Saqué mi armónica de mi sucia bandana roja y tocaba tristemente, mientras Bobby cantaba un Blues... Finalmente, cantamos todas las canciones que el conductor conocía>... Sí, en efecto, "Me & Bobbie McGee" me transmite ese espíritu aventurero que arrastro desde mi nacimiento...e incluso mucho antes. Podría formar parte de la banda sonora de mi primer libro publicado, sobre todo durante mi pequeña odisea atravesando todo México hasta Fort Worth (Texas).
A veces, no sólo cuenta que nos guste una melodía; si además nos identificamos con la letra, mucho mejor. Es lo que me ocurre con este Clásico. En términos astrológicos y a nivel muy general, podríamos dividir la música country en dos facetas que, obviamente, están interconectadas:
1-La parte hogareña: la familia, el viejo hogar (en las montañas del sureste, en las praderas del Oeste,...), la música interpretada en los ‘front porches’, en establos, fiestas locales, bodas, etc.
2-La parte itinerante, viajera o aventurera: cuando se traspasan esos límites y se ama una existencia errante... ¿Recordáis la típica expresión "cuando oigo el silbato del tren, mi corazón pide que me marche en busca de otros lugares", la pasión por vagar... Trenes, carromatos, caballos, barcos de vapor, espectáculos itinerantes...
La faceta 1 estaría emparentada con el signo de Cáncer, mientras que la 2 respondería a Sagitario. Hablando en términos muy genéricos, claro, porque, obedeciendo a la ciencia astrológica, habría que matizar mucho (Casas, Aspectos entre astros, ascendente, signos en determinados planetas, etc...) ya que el género posee múltiples facetas, según cada individuo, entorno o circunstancia. Por ejemplo, interpretar música con la familia en un ‘front porch’ sería Cáncer pero si alguien cantase añadiríamos a Tauro ya que este signo rige la garganta, la voz. O, en el otro ámbito, uno de aquellos músicos que viajaban en carromatos vendiendo fraudulentas pócimas, interpretando cómicas canciones, se ajustaría especialmente al signo de Géminis.
En cualquier caso, yo me identifico con "Me & Bobbie McGee", me encanta tanto la melodía como su letra. Y acostumbro a llevar bandanas... o turbantes, últimamente.