J.P. Harris & the Tough Choices encandiló en el Rocksound de Barcelona
El del 22 de Abril de 2015 en el Rocksound fue uno de los mejores conciertos de música country que recordamos en los últimos años en Cataluña. J.P. Harris & the Tough Choices hicieron méritos para entrar al club de las noches mágicas de nuestra memoria.
El concierto parecía que empezara a las 21:00h, según la entrada y todos los anuncios que se habían hecho. Pero sólo los noveles a la sala llegaron antes de las nueve para ser puntuales (gente venida de todas partes, desde Tarragona, Lleida o Girona llenó el local). Quienes ya saben de qué va la historia, no madrugaron tanto y fueron llegando hacia las 22:00h, cuando empezó la fiesta.
Pero ser puntuales nos permitió saludar antes de que nadie al líder de la banda y darnos cuenta que sería una gran noche. Estas cosas se notan con los gestos, las palabras y las miradas. Y un poco de conversación que tuvimos en el momento de saludarnos y a hacer las fotografías de rigor ya nos dejó entrever que había venido dispuesto a hacernos pasar un rato de buena música country. Detrás la apariencia de un alocado hipster, J.P. Harris esconde una música country conservada con cuidado desde la época del abuelo Williams, con el aprecio de quien custodia un tesoro casi centenario. En el escenario, tiene un estilo más bien sobrio, sin demasiada gesticulación. (Algún guiño se le escapo) Tampoco se desahogaba mucho presentando las canciones, lo hizo en pocas ocasiones, quien sabe si por timidez o por no estar seguro que lo entendiéramos. Pero así que empezaba a sonar la música te permitía hacer un viaje de miles de kilómetros al oeste; bien, y por culpa del Nashpop dominante, también te permitía viajar atrás en el tiempo...
El llanto de la pedal-steel (qué habría sido la música country sin este instrumento), las florituras de la guitarra eléctrica y una voz que tanto subía la cumbre como bajaba al valle convirtieron el Rocksound en el honky tonk donde todo aficionado a este estilo musical desea haber peregrinado al menos una vez a la vida. Y, he aquí, que lo pudimos disfrutar por unos miserables 12 euros y en Barcelona capital. Un auténtico privilegio.
Durante las cerca de dos horas de concierto sonaron básicamente temas de sus 2 CD's editados hasta ahora: sonaron “Badly bent”, “Two for the road”, “I'll keep calling”, “I'm stayin' here”, “Home is where the hurt is”, “South Oklahoma”, “One for every day”, “Gear Jammin'Daddy” (fue la última antes de los bises) o “Just your memory”.
Pero también tuvieron su lugar algunos temas de otros autores, como por ejemplo “Wine me up”, “Kiss an angel good morning”, “The Fireman” o “White lightning”, que cerró una noche apoteósica.
Si tenemos que ponernos a buscar alguna pega en el concierto, quizás el volumen era demasiado alto, excesivo. Suponemos que es lo que hay, y que la mayoría de forofos lo prefieren así, pero no hace falta que las orejas te revienten para poder apreciar la buena música. Es más, dicen que incluso es más sencillo hacerlo con un volumen más bajo.
Después del concierto, saludos, fotografías, autógrafos de todo tipo... JP Harris comentaba que creía que encontraría un local medio vacío, con veinte personas y para de contar. Y que le sorprendió encontrarse con un Rocksound bastante lleno y con un público entregado y conocedor del qué iba a degustar.
Fue un privilegio. A veces soñamos en qué grandes estrellas del country vengan a tocar a este país. Que llenen Palacios de deportes, campos de futbol… Y no somos conscientes que, si pasara esto, sería prácticamente imposible hacer lo quE pudimos hacer ayer. Poder tocar (literalmente), poder hablar y saludar personalmente a un grupo que, si sigue así, merecerá pasar a la historia de este estilo musical.
Con conciertos como los de ayer, la llama de la country music seguirá ardiendo. ¡Y que sea así por muchos años! ¡Viva la música en directo!
Comentarios
Estupendo comentario del que debió ser un estupendo concierto.
Me tiro de los pelos por no haber podido asistir
Muchas gracias.