Billy Joe Shaver: Su autobiografía
Shaver ha tenido el tipo de vida que sólo puede narrarse a través de la música Country, y en sus canciones está escrita su historia. Tenemos la oportunidad de conocerle aún más gracias a la autobiografía editada en 2005 con el título “Honky Tonk Hero”.
"Billy Joe Shaver puede que sea el mejor ‘songwriter’ vivo.” — Willie Nelson
"Es un escritor tan real como Hemingway. Es eterno." — Kris Kristofferson, en el Dallas Morning News
"Billy Joe Shaver fue y es uno de esos raros talentos, un completamente inconfundible, impecablemente honesto escritor de canciones." — Grant Alden, No Depression
"Billy Joe es único. Uno entre un millón. Tiraron el molde al hacerlo. ¡El mejor!" — Robert Duvall
¿Qué hace a un hombre tan especial? Definitivamente no es ni ha sido nunca un santo. En su vida hay episodios que harían ruborizar al mismo demonio, pero irradia sinceridad. Es honesto. Honesto consigo mismo, honesto con los demás, honesto con sus composiciones. Una vez el “songwriter” de Nashville Marshall Chapman dijo “si no es Billy Joe Shaver en persona el que canta, entonces es que alguien te está mintiendo”. Se dice que los compositores de canciones se concentran en eliminar la grasa cuando escriben una canción. Shaver elimina la grasa, la carne, el hueso y va directo a la médula. No da excusas. Se muestra tal y como es.
Nacido en 1939 en Corsicana, Texas. Su padre murió antes de que él naciera, así es que su madre se fue a Waco en busca de trabajo, lo encontró en el Green Gables Saloon (historia que escuchamos en “Honky Tonk Heroes”), dejándole a él y su hermana Patricia para que crecieran con su abuela, viviendo de la pensión de ésta. La frase “la pensión de mi abuela es la única razón por la que estoy hoy aquí” del tema “Georgia on a Fast Train” no es el simple recurso de un poeta. Se unió a la armada, fue expulsado tras una pelea con un oficial, lo intentó como cowboy, y trabajaba en un aserradero cuando perdió parcialmente cuatro de los dedos de su mano derecha.
Muchos aspirantes a “songwriter” mantienen un trabajo al que volver cuando las cosas no van bien. Con Billy Joe era al revés, cada vez que trataba de coger un trabajo estable, algo pasaba que le volvía a empujar a componer. Nació para componer. Supone un placer indescriptible saber que hay un hombre que está cumpliendo con su destino. Así describe el componer canciones "Para mí, la canción es poesía. Eso es todo lo que es. Es la forma en la que describo el mundo que me rodea, le doy sentido. (…) Creo que mis canciones vivirán mucho tiempo después de que yo me vaya”.
Billy Joe Shaver empezó componiendo. Escribió la mayor parte de las canciones del álbum que supuso un hito en la carrera de Waylon “Honky Tonk Heroes” (1973). John Anderson construyó una carrera a partir de "I'm Just an Old Chunk of Coal (But I'm Gonna Be a Diamond Some Day)", una canción que Shaver compuso justo después de decidir dejar las drogas y la bebida y acudir a Dios en busca de ayuda. Fue nominada a canción del año de la CMA en 1981, aunque Johnny Cash ya la había grabado en 1978. Las referencias religiosas, como en “Old Chunk…”, están presentes en muchas de sus canciones, pero nunca dominan sobre las emociones.
Sus canciones han sido grabadas por los grandes, desde Willie Nelson a los Allman Brothers Band ("Sweet Pea"), gracias a los que consiguió contrato en Capricorn, editando algunos de sus álbumes de los 70. También han grabado sus canciones Tom T. Hall ("Willie the Wandering Gypsy and Me", “Old Five And Dimers Like Me”), Bobby Bare (“Music City USA”, "Ride Me Down Easy"), Bob Dylan o Elvis Presley ("You Asked Me To"). Pero nadie podía cantarlas como Shaver creía que debían interpretarse, así es que empezó a hacerlo él mismo. Kris Kristofferson, que fue el primero en popularizar una canción de Billy Joe, "Good Christian Soldier", produjo en 1973 en su discográfica, Monument, el primer ábum de Shaver “Old Five and Dimers Like Me”. Nunca consiguió que el éxito le sonriera de la forma que seguramente merecía. Cometió todos los errores que puede cometer un “singer/songwriter” en Nashville. Cada vez que grababa un álbum en solitario, la discográfica quebraba. Nadie, aparte de la comunidad de compositores, sabía quien era, pero en ese círculo era considerado un dios. No fue hasta 1993, con “Tramp on Your Street”, acompañado de su hijo Eddy que con su guitarra introduciría el rock en su sonido, que el gran público descubriría a Billy Joe Shaver. Eddy Shaver revitalizó la carrera de Billy. La aparición de ese disco en la época en que los jóvenes “hat acts” eran la sensación en Nashville le ganó todavía más reconocimiento como uno de los discos de Country más puro y duro que habían llegado a las estanterías en años. Varios discos más le consolidaron y le ganaron el respeto unánime de la industria. En 1998 intervino, con un papel secundario, en la película de Rober Duvall “The Apostle”.
Pero volvieron los tiempos duros. En el margen de apenas un año, murió su madre, murió su mujer (ambas de cáncer) y su hijo Eddie murió de sobredosis el día de fin de año de 2000, a la edad de 38 años. Como puntilla, en 2001, tuvo que superar un ataque al corazón sufrido sobre el escenario del Gruene Hall de New Braunfels (el más veterano de los “dancehalls” de Texas). La mayoría de los hombres se habrían rendido, y Billy quería hacerlo. Quería morir de la peor forma posible, pero su fe pudo más que su tristeza. Volvió a escribir canciones. Los resultados se pueden encontrar en “The Earth Rolls On” (2001) y “Freedoms Child” (2002), dos álbumes ciertamente sólidos que podrían estar entre lo mejor que haya hecho nunca.
Pero todavía no había acabado, simplemente estaba calentando. Llegó “Billy and the Kid” un álbum en el que Billy Joe completaba el disco en solitario en el que estaba trabajando Eddy cuando falleció. Luciana Pedraza ha filmado el documental ”Portrait of Billy Joe”, que principalmente muestra a Billy hablando sobre su vida. Recientemente ha añadido a su discografía un nuevo disco “Real Deal”. Compadre Records ha editado el concierto homenaje que se celebró en 2004 con motivo de su 65 aniversario. Y también en 2005, por si no fuera suficiente, University of Texas Press ha editado su autobiografía “Honky Tonk Hero”, apoyado por Brad Reagan. Aunque para los que siguen desde hace tiempo sus canciones con la atención que merecen es como repasar la vida de un viejo amigo, sólo que en un soporte diferente. De hecho en el libro, la narración de Billy Joe ocupa 72 páginas, mientras que las 119 restantes están ocupadas por la trascripción de todas y cada una de las canciones que ha compuesto y han sido grabadas.
Junto a Kris Kristofferson y Willie Nelson, Shaver es uno de los pocos Country Outlaws de verdad que nos quedan. Y como auténtico rebelde del Country es un superviviente, y sigue escribiendo canciones. “Es lo que hago, es lo que siempre he hecho. Componer canciones es el mejor y más barato psiquiatra que existe. Seguiré haciéndolo mientras pueda”. Palabra de Billy Joe Shaver.