Charlie Daniels Band, the - Powder Keg (1987)
Desde “Still in Saigon”, la canción que estaba incluida en su LP de 1982 Windows, the Charlie Daniels Band ni siquiera se había acercado al éxito crossover del que habían disfrutado en la década de los setenta. Sin embargo, ajenos a los dictados del mercado y fieles a su sonido original, sus regulares lanzamientos encontraban buena acogida entre una audiencia quizá más reducida pero que mantenía su fidelidad a la banda, seguros de no sentirse defraudados por lo que se iban a encontrar. La banda disipa cualquier duda al respecto desde el primer corte del álbum, el poderoso Rock Sureño “Bogged Down in Line with You”.
En Powder Keg es de destacar la presencia de Ricky Skaggs en las armonías vocales del enérgico “Juanita”, donde Daniels le canta a la mujer con la que comparte la vida: “Entras a hurtadillas en casa / no son horas de llegar para una mujer casada / con el vestido sudoroso y el pintalabios hecho un desastre. / Y me sigues diciendo que todo va bien” ¿Alguien duda lo que está pasando? Desde luego él no porque, orgulloso, sentencia: “Baby, creo que debes devolverme mi anillo / porque cuando esta tarde te despiertes me habré ido / (...) Te puedes quedar con el deportivo, todo lo que quiero es mi guitarra”.
Como en otros de sus trabajos el disco tiene un tono festivo y de exaltación de la juerga, ya sea a través del retrato de un sábado por la noche en “Saturday Night U.S.A.”, que además puede servir de ejemplo de lo que se dio en llamar Country-Disco en los ochenta; como mediante una invitación al baile en “Dance With Me”; o con los aires Soul de “Love Pouring Out Of Me” o el R’n’R de “What She Do to Me”, por cierto, cantado por Taz DiGregorio, normalmente limitado a los teclados. También el guitarrista Tom Crain tiene su momento de protagonismo al cantar la única balada del álbum “Stay With Me” que, indefectiblemente, nos remontará hasta el Country-Rock de base acústica que fuera una fuerza dominante en los setenta.
No puede haber disco de Charlie Daniels sin un retrato político-social. En este caso precisamente con el amenazante y oscuro tema “Powder Keg” que le da título, donde canta sobre la violencia que subyace en la sociedad actual y que la convierte en el “barril de pólvora” del título. La segunda parte de la historia, en un tono similar, llega con “Trapped in the City” donde desea tener un par de alas para huir de “la jungla de hormigón”, donde por la noche reinan las bandas, los violentos, las prostitutas y los atracadores.
Powder Keg es un buen trabajo de the Charlie Daniels Band para quien guste de su característico sonido y del eclecticismo que hizo famoso a la banda, en el que el Country, por comparación, quizá haya perdido peso a favor de excursiones hacia el Soul y el Blues, estilos musicales, de todas formas, inconfundiblemente americanos y que han tenido presencia en su música desde siempre.