Chris LeDoux - Stampede (1996)
Stampede sería el quinto lanzamiento en major de Chris LeDoux y da toda la sensación de que alguien decidió que era el momento de abrir su característico sonido al Pop-Rock, con el eterno objetivo de Nashville en ampliar su audiencia.
No es que falten canciones que nos hablen del rodeo y el estilo de vida Western, las enérgicas “Stampede” y “Take me to the Rodeo” (justo las únicas que llevan su firma) están para demostrarlo aunque sean muestras de la faceta rockera que LeDoux siempre ha cultivado. Pero la profusión de cortes con transfondo romántico como “I’ll Get the Job Done”, “Now That’s All Right With Me”, “When I Say Forever” y “That’s What Loving You Means to Me” ponen a LeDoux en un contexto que no es el suyo y en el que no puede mostrarse tal y como es. Ya eran muchos años cantando sobre pistoleros, cowboys, caballos, toros y espacios abiertos como para ponerse a loar al amor eterno como hilo fundamental de un disco a estas alturas.
Aunque igualmente romanticonas consigue hacer más suyas “Gravitational Pull”, más que cantándonos, hablándonos con evidente socarronería sobre la irresistible fuerza gravitacional que atrae a hombres y mujeres y la relajada y atmosférica balada “Calico Moon”. También sale airoso cuando con un pausado Honky Tonk nos invita a un local reservado para la diversión, en el que la juke box no toca canciones tristes y donde no se permiten quejas y lloriqueos, bajo pena de “Five Dollar Fine” (multa de cinco dólares). La balada que mejor funciona es “Fathers and Sons” sobre la relación de padres e hijos y lo bien que se entienden las palabras que se recibieron del padre cuando el hijo, a su vez, también se convierte en padre.
Afortunadamente es Chris LeDoux quien firma el álbum, por lo que la steel y el fiddle siguen siendo los instrumentos principales, su voz se mantiene tan expresiva e inconfundible como siempre y aunque haya evidentes concesiones comerciales y no sea especialmente destacable entre su amplia discografía, no por ello Stampede deja de ser un disco al que merece la pena dedicar tiempo para escucharlo.
Comentarios
Yo creo que era un tipo que caía bien. Al escuchar su música se nota lo bien que lo pasa, la voz es única... y cuando lees sobre su vida, se sale.
Una pena que nos dejara tan joven
"Stampede" y "Take Me to the Rodeo" son LeDoux en estado puro... aunque tiene que gustarte cuando se pone enérgico (por no decir rockero).