Ricky Lee Phelps - Signs of the Times (2003)
Ricky Lee Phelps fue miembro fundador y voz principal de los Kentucky Headhunters. Una banda que, en su momento de máxima popularidad a finales de los años ochenta, primeros noventa del siglo XX, consiguió todos los reconocimientos imaginables que se otorgan al mejor grupo de Country (incluyendo un Grammy y cuatro premios de la CMA). Más adelante y junto a su hermano Doug acabó abandonando la banda para crear el dúo Brother Phelps, un proyecto que no se alargó más allá de la edición de un par de álbumes. Después de centrarse durante unos años en la vida familiar, volvió a dar señales de vida musical con Signs of the Times en 2003, que editaría en la por entonces recién creada discográfica independiente Crossfire.
El contundente sonido de los Headhunters en el que dominaba el Rock Sureño orientado al Country llega hasta este álbum, producido por el propio Phelps y grabado en su estudio. Basta escuchar, por ejemplo, la enérgica “Shake it Off”. Sin embargo, como hijo de un predicador, y él mismo también convertido en predicador a la altura en que Signs of the Times viera la luz, se ocupa en las letras de poner en palabras historias inspiradoras y ejemplificantes. Ya en la presentación del álbum decía: “esta selección particular de canciones son en gran medida parte de mí y espero que también se conviertan en parte de ti. He escarbado muy profundamente en mi alma y he escrito algunas de las verdades que me enseñaron desde niño, tratando de contarlas en una canción de forma que puedan ser entendidas por ti, el oyente. Si una sola de mis canciones puede cambiar la forma de pensar de una sola persona para mejor, entonces mi objetivo se habrá cumplido”. Y a ello se aplica, ya sea despertando la conciencia de que los niños no deben pagar las consecuencias de un matrimonio fallido en la sentimental balada “Sometimes” o en el tema de poderoso guitarreo que da título al álbum, “Signs of the Times”, advirtiendo que antes o después te encontrarás con el Creador... y más vale que no tengas que esconderte cuando llegue el momento.
De todas formas también hay tiempo para colar canciones de temática más mundana como “John Deere Letter” donde la mujer de la que se separa no sólo se queda con la casa y las tierras, sino que se va con su tractor, dejando atrás como recuerdo sólo una carta que empieza ‘Dear John’, que Phelps convierte en divertido recurso para jugar al equívoco con la conocida marca de tractores que aparece en el título.
Los originales Kentucky Headhunters dejaron huella en los aficionados al Country de querencias más rockeras y eminentemente sureñas, Ricky Lee Phelps recupera buena parte de aquel característico sonido que él mismo ayudó a construir en un álbum que resultará especialmente interesante para los que recuerdan con nostalgia a los Cazadores de Cabezas originales.